Piden derogar el avenimiento y que los jueces se pongan en el lugar de la víctima de violencia

La directora del Instituto de Género, Derecho y Desarrollo (INSGENAR) de Rosario, Susana Chiarotti, opinó que se debería derogar la figura del avenimiento que permitió que en General Pico un hombre condenado por violación quede libre y pueda asesinar a su víctima. En declaraciones a Informativo FARCO, la abogada, que integra el comité de expertas en violencia de la Organización de Estados Americanos (OEA), criticó a los dos jueces pampeanos que avalaron la libertad del acusado por haber sido “insensibles a la realidad que vivía ella”, marcada por una historia de violencia familiar. La especialista aseguró que la figura del avenimiento “tiene que ser derogada” y propuso también que los jueces empiecen a “ponerse en el lugar de la víctima” de la violencia de género.

Los magistrados en cuestión son Carlos Flores y Gustavo Jensen, dos de los integrantes del Tribunal de Impugnación, que avalaron que el joven Marcelo Tomaselli, de 21 años, condenado por violar a su pareja Carla Figueroa de 18 años, saliera libre bajo la figura del avenimiento prevista en el código penal. Ese pedido para que el violador quedara libre, previo casamiento con su víctima, había sido rechazado por los tres jueces de otro tribunal y por dos fiscales de la provincia. Sin embargo gracias a Flores y Jensen, Tomaselli quedó libre, consiguió casarse con la joven y terminó asesinándola a puñaladas a los pocos días y delante del hijo de ambos. El tercer juez del tribunal que integran Flores y Jensen, Pablo Balaguer se había opuesto ya que para él la joven no dio su consentimiento libre de presiones.

La directora del INSGENAR rebatió la creencia de que “un marido, un novio tiene menos pena cuando viola y además que la víctima puede estar en condiciones de igualdad con el violador y sentarse a una mesa alegremente, como si fueran iguales y hacer un acuerdo”.

Sobre el avenimiento previsto en estos casos en el código penal Chiarotti aseguró que “esa figura tiene que ser derogada, se pidió muchas veces, se presentaron varios proyectos, nunca se nos hizo caso. Ahora estos dos jueces ignorando la nueva ley de violencia (contra la mujer), que prohíbe todo acuerdo, toda mediación, todo avenimiento, la aplican igual y tenemos que dejan libre a una persona muy violenta, dan por supuesto que la víctima dio el pleno consentimiento y no tuvieron en cuenta que era una chica que a los 8 meses de haber nacido perdió a la madre por violencia del padre, que se crío prácticamente sola, que no tenía contención familiar, no tenía recursos simbólicos, recursos materiales al punto que había tenido que ir a vivir a la casa de la suegra”.

Con una historia marcada por la violencia de género la chica “fue presa fácil de la presión del abogado del acusado que la convenció para que firme y ahí tenemos el resultado. Un juez (Balaguer) se dio cuenta de toda la maniobra y dijo ‘no, esta chica no puede dar el consentimiento porque hace pocos meses estaba aterrada de que él pudiera salir, tenía miedo de morir’”.

Finalmente la integrante del comité de expertas en violencia de la OEA concluyó que “en estos dos jueces que dan el permiso vemos dos jueces que son insensibles a la realidad que vivía ella y que no tuvieron en cuenta la situación que se vive y lo difícil que es salir de una situación de violencia para alguien que no tiene apoyo familiar ni grandes medios económicos. Me parece que hay que ponerse en el lugar de la víctima”.

Entrevista de FARCO a Susana Chiarotti

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